lunes, 20 de junio de 2011

Criterios de Evaluación e Indicadores de Desempeño Escolar


Nonoatzin Hernández Cadenas
Diana Yunuen Torres  Rincón


     Siendo la practica educativa, una actividad compleja que involucra no solo los contenidos temáticos propuestos en un programa de estudios, sino que  abarca también y de una manera muy puntual la formación social, y axiológica de los alumnos, resulta difícil a la hora de evaluar el papel que los participantes – profesores y alumnos- desempeñan en este proceso.

     Esta situación nos acorrala e impide de una forma clara realizar o proponer determinados criterios que nos permitan llegar a evaluar las actividades desempeñadas. Mencionamos esto, simplemente porque nos encontramos ante una multitud de criterios e indicadores que pudieran incidir en la evaluación de los docentes y alumnos.

Aquí cabría preguntarnos que es lo que se desea saber ¿el papel del docente en el desempeño escolar del alumno? o ¿el papel del alumno en el desempeño escolar? las respuestas son múltiples, porque existen tantos acciones a evaluar como propuestas hagamos. Para ejemplificar lo anterior esbozaremos algunas tareas que pudieran evaluarse respecto del profesor:

v  Su comportamiento dentro del aula,
v  Su desempeño en el cumplimiento del programa asignatural,
v  Los resultados obtenidos en cuanto a eficiencia terminal,
v  Su preparación, capacitación y actualización pedagógica,
v  La capacidad de manejo y control del grupo,
v  El cumplimiento con las normas escolares establecidas, etc.

Como se podrá ver, son muchas las actividades desempeñadas por el docente, ¿que actividades debemos atender para realizar una verdadera evaluación de su desempeño?.  Si por el contrario lo que nos interesa conocer es  el papel del alumno en el desarrollo escolar, igual o más preguntas podríamos hacernos.

     Pero bueno, no obstante que es complejo y para no rehuir a esta actividad, y puesto que somos docentes de tiempo completo, escogeremos la primer interrogante – relativa al papel del docente- y estableceremos  una serie de criterios e indicadores que nos den la pauta para realizar este trabajo.

Antes de mencionar nuestra propuesta, vale la pena clarificar las categorías de Evaluación y desempeño escolar.
EVALUACIÓN.- Se sostiene como hipótesis que el surgimiento del término evaluación, se encuentra estrechamente vinculado al proceso de industrialización en los Estados Unidos de Norteamérica y particularmente al desarrollo del concepto de Taylor en 1911, relativo al manejo científico del trabajo; por lo tanto tal noción responde a las exigencias de eficiencia del capital, que es una  resolución económica,  que se refiere  al control social del hombre en lo referente a la producción.

La evaluación educativa nació y se desarrollo en este siglo, en un principio creció al amparo de la Psicología experimental. Enrich y Tyler impulsaron las actividades evaluatorias en el campo de las actitudes, intereses, hábitos y adaptación social.

Actualmente sabemos que la evaluación cumple una función legitimadora de la ideología en las sociedades modernas, al proporcionar un mecanismo por el cual se hacen juicios sobre el mérito. Los buenos resultados académicos se aceptan como un indicador de las habilidades que permitirán a un individuo progresar y tener éxito en una sociedad que a su vez seleccionará a aquellos que contribuirán más en ella, en términos de liderazgo social y económico.

Por lo cual la evaluación es un elemento indispensable de toda acción humana sistematizada, su función depende de una axiología o teoría de los valores, ya que no es posible valorar algo sino es con relación a una escala.

Resumiendo tenemos que para nosotros la evolución dentro del aula, es un proceso en el que se integran tres tipos y momentos:

1º.- Evaluación diagnostica que se realiza al inicio del curso, unidad o tema y carece de valor.
2º.- Evaluación formativa,  se realiza durante el proceso educativo –todo el ciclo escolar- y se le asigna el valor que se acuerde previamente entre el docente y los alumnos.
3º.- Evaluación sumativa, normalmente se aplica al final del curso y es la suma de todas las actividades realizadas.

Terminamos con esta categoría afirmando que lo importante de la evaluación no es saber cuanto aprendió el alumno, sino que y porque no fue preparado para  aprenderlo.
DESEMPEÑO ESCOLAR. Cuando tratamos de explicar en que consiste el desempeño escolar del docente, necesariamente caemos en su práctica docente, por lo tanto y para clarificar esta categoría tenemos que “La práctica docente se conforma por un sistema complejo de acciones que se manifiestan en el ejercicio de la profesión específicamente en el contexto escolar. Cabe resaltar que la práctica docente es el proceso mediante el cual el maestro se constituye y se recrea cotidianamente como tal y de manera intuitiva crea cada vez nuevas estrategias didácticas, técnicas y métodos, aprobando unos y desechando otros.
En este sentido rescatamos que para saber cual es el desempeño académico del docente, tenemos que tomar en cuenta sus particularidades académicas y laborales, así como la forma en que conduce el proceso educativo; sin dejar de lado el conocimiento o desconocimiento que tenga del contexto en el que esta actuando.

Después de clarificar las dos categorías, pasamos a plantear cuales son los criterios e indicadores  que consideramos importantes para evaluar el desarrollo escolar.




CRITERIOS                 
                          
INDICADORES

1.-Desempeño profesional del docente
1.1.Capacidad de planeación y dominio de los contenidos temáticos de los programas asignaturales
1.2. Capacidad para facilitar la construcción del conocimiento.
1.3. Facilidad en la comunicación dentro del aula.
2.-Actualización Profesional y capacitación docente
2.1. Nivel profesional de estudios
2.2. Asistencia y aprobación de cursos de didáctica y pedagogía
2.3. Participación en diseño e impartición de cursos de actualización para docentes
3.- Respeto de la normativa institucional
3.-1. Asistencia y puntualidad a  las clases.
3.2. Observancia y acatamiento de los derechos y obligaciones de los alumnos.
3.3. Cumplimiento y respeto de la normativa de la UMSNH.
4.- Participación en  reuniones académicas y propuestas para mejorar el proceso educativo
4.1. Asistencia a reuniones de academia de profesores y elaboración de material didáctico
4.2. Asistencia a foros, encuentros o seminarios de carácter educativo
4.3. Presentación de propuesta o sugerencias para agilizar el proceso del aprendizaje.
5.- Relaciones con los alumnos, profesores y directivos.
5.1. Flexibilidad para aceptar la opinión de los alumnos y respeto de raza y creencias
5.2. Nivel de comunicación con los alumnos dentro y fuera del aula.
5.3. Apoyo y cooperación entre profesores y directivos.


CONCLUSIÓN

     No obstante que estos  criterios e indicadores nos sirven para darnos una idea del papel que juega el profesor dentro del trabajo educativo, no son suficientes para evaluar justamente el desempeño escolar. Estamos conscientes que sólo son  una arista de la pirámide educativa que nos proporciona parámetros del comportamiento que observan los profesores en el proceso de aprendizaje, pero no se traduce totalmente en la realidad de su desempeño escolar.

     Con esta  ponencia, dejamos claro, lo que al inicio esbozamos, en donde afirmamos que no solo es difícil, sino arriesgado emitir resultados sobre la actividad docente, cuando únicamente se toma como referente a uno de los involucrados en el proceso educativo.-en nuestro caso al profesor- dejando de lado a aquellos a quien va dirigida la educación -los alumnos- y la forma en que se articulan los conocimientos que son puestos en operación mediante la dosificación, jerarquización y entrelazamiento coherente de los mismos en el mapa curricular, que es el documento en el que se operativiza el diseño curricular para validar los estudios del nivel ofertado.
Concluimos diciendo que una verdadera evaluación del desempeño escolar debe  involucrar a los docentes, alumnos y al currículo, únicamente de esta manera podemos visualizar certeramente el desempeño que el docente tiene en el proceso escolar.



También se encuentra disponible en www.didactica.umich.mx/.../ Nonoatzin%20Hernández%20y%20Diana%20Torres.doc


martes, 14 de junio de 2011

Decálogo Sobre Uso Didáctico de las TIC en el Aula

Propuesta para debate elaborada por M. Area, marzo 2007 disponible en http://ordenadoresenelaula.blogspot.com/

1. Lo relevante debe ser siempre lo educativo, no lo tecnológico. Por ello, un docente cuando planifique el uso de las TIC siempre debe tener en mente qué es lo que van a aprender los alumnos y en qué medida la tecnología sirve para mejorar la calidad del proceso de enseñanza que se desarrolla en el aula
2. Un profesor o profesora debe ser consciente de que las TIC no tienen efectos mágicos sobre el aprendizaje ni generan automáticamente innovación educativa. El mero hecho de usar ordenadores en la enseñanza no implica ser mejor ni peor profesor ni que sus alumnos incrementen su motivación, su rendimiento o su interés por el aprendizaje.
3. Es el método o estrategia didáctica junto con las actividades planificadas las que promueven un tipo u otro de aprendizaje. Con un método de enseñanza expositivo, las TIC refuerzan el aprendizaje por recepción. Con un método de enseñanza constructivista, las TIC facilitan un proceso de aprendizaje por descubrimiento.
4. Se deben utilizar las TIC de forma que el alumnado aprenda “haciendo cosas” con la tecnología. Es decir, debemos organizar en el aula experiencias de trabajo para que el alumnado desarrolle tareas con las TIC de naturaleza diversa como pueden ser el buscar datos, manipular objetos digitales, crear información en distintos formatos, comunicarse con otras personas, oir música, ver videos, resolver problemas, realizar debates virtuales, leer documentos, contestar cuestionarios, trabajar en equipo, etc.
5. Las TIC deben utilizarse tanto como recursos de apoyo para el aprendizaje académico de las distintas materias curriculares (matemáticas, lengua, historia, etc.) como para la adquisición y desarrollo de competencias específicas en la tecnología digital e información.
6. Las TIC pueden ser utilizadas tanto como herramientas para la búsqueda, consulta y elaboración de información como para relacionarse y comunicarse con otras personas. Es decir, debemos propiciar que el alumnado desarrolle con las TIC tareas tanto de naturaleza intelectual como social.
7. Las TIC deben ser utilizadas tanto para el trabajo individual de cada alumno como para el desarrollo de procesos de aprendizaje colaborativo entre grupos de alumnos tanto presencial como virtualmente.
8. Cuando se planifica una lección, unidad didáctica, proyecto o actividad con TIC debe hacerse explícito no sólo el objetivo y contenido de aprendizaje curricular, sino también el tipo de competencia o habilidad tecnológica/informacional que se promueve en el alumnado.
9. Cuando llevemos al alumnado al aula de informática debe evitarse la improvisación. Es muy importante tener planificados el tiempo, las tareas o actividades, los agrupamientos de los estudiantes, el proceso de trabajo.
10. Usar las TIC no debe considerarse ni planificarse como una acción ajena o paralela al proceso de enseñanza habitual. Es decir, las actividades de utilización de los ordenadores tienen que estar integradas y ser coherentes con los objetivos y contenidos curriculares que se están enseñando